viernes, agosto 11, 2006

El club de los jóvenes científicos.



Hace mucho tiempo que no veía un anime que me cautivara. Aunque no tiene grandes efectos especiales, sin una animación fuera de lo común, con una banda sonora "simpática", tiene algo que hace mucho no encontraba: Inocencia. Y no me refiero a ésa sobre-edulcorada y diabetogénica que hay en Candy Candy o la enlatada, mass-media-mainstream de las producciones de Disney. No, en este caso, no es así. Hablo de la inocencia que pueden proyectar 3 tíos cincuentones con afición a las ciencias astronómicas, al trago y con el sueño infantil de llegar a Marte; la hija de uno de ellos, astrofísica y autora de un libro no tomado en cuenta por el resto de la comunidad científica, esposa fiel y comprensiva; el marido de la anteriormente nombrada, mecánico de barcos, con dipsomanía incentivada por el suegro y con una reverenda cara de "se-me-cae-la-baba-cuando-te-veo-haciendo-eso" que pone cuando su pareja hace cálculos. Me parecio realmente tierno ver cómo viajaban aquellos 5 personajes rumbo al planeta rojo ¡En un dirigible! simplemente guiados por las corrientes del éter. Inocencia al ver como los viejitos se peleaban como niños para ver quién pisa primero el suelo marciano. Tierno al ver cómo la hija adopta el papel de madre de los otros 4. Simplemente, genial.

¿Mencioné que la historia se desarrolla a mediados de los años cincuenta?

El anime donde está la historia que les recomiendo se llama "Spirit of Wonder", creado por Kenji Tsuruta. Bajo éste título se encuentra otras historias más: "El planeta de Miss China" y "Reduciendo a Miss China".


Definitivamente, si tienen la oportunidad de verla ¡Háganlo!

say no more!